"Y yo con estos pelos" fue lo que pensé cuando mis amigas me dijeron que al final sí que salíamos. Mira que ya me lo advirtieron, "estamos que sí que no pero seguramente si"
Yo toda perezosa pensé que ya me arreglaría en diez minutos, pero claro, no pensé que diez minutos en una mujer es una hora en tiempo real, y si encima ese día nos hemos levantado "raras" no hace falta decir que esa hora se convierte en dos.
Es curioso como nos notamos esos días en los que el humor es distinto al que tenemos normalmente, no sabemos si entrar o salir, si blanco o negro, si agua o chocolate, en fin, que entramos en un bucle que la mejor solución es que nos encerrasen en una habitación y cada tres horas nos pasasen un vasito de agua.
Pues ese día me tocó, y ahí me tenías tumbada en el sofá pensando "estaría mejor por ahí", y cuando hacía mención de empezar a vestirme decía "no no, mejor aquí" y así durante cincuenta minutos hasta que se acercó la hora que habíamos quedado y en un arranque de "venga que sí que voy" me metí a la ducha. Ahora el problema era mi pelo, mal no estaba pero como el genio era el que era, pues no me veía bien con el pelo suelto y por si fuera poco no me apetecía recogérmelo, vamos, que no sabía ni yo lo que quería. Después de un rato pensando me vino el chispazo de la prenda que desde hace un par de veranos me saca de apuros, ¡mi maravilloso turbante! Pieza que evoca la sofisticación, la elegancia y la clase de los años veinte, y que por suerte para mí, vuelve a las calles, aunque más bien diría que no se ha marchado nunca.
Al final me decidí por un mono negro entallado hasta la cintura y con detalle de encaje en los laterales para enseñar de forma disimulada la ropa interior, como zapatos unas sandalias bicolor, cinturón dorado y las prendas clave de este outfit, el turbante que le da clase a cualquier look y el clutch recreando las portadas de la revista Vogue. También llevé anillo del estilo que os nombre en posts anteriores cubriendo la totalidad del dedo y al cuello una cadenita con una cruz muy pequeña.
Esta vez en los labios me decidí por un coral como el esmalte de uñas para que "vistiese" un poco más.
Qué os ha parecido esta solución? Haríais lo mismo u optaríais por la clásica coleta?
Gracias por vuestros comentarios!!
"And me with this hair" was what I thought when my friends told me went for a walk.
I thought I will be ready in ten minutes, but of course, did not think ten minutes in a woman is an hour in real time.
It's funny how we know we have days that the mood is different from what we have usually. We do not know whether in or out, whether black or white, whether water or chocolate, finally, I think that the best solution is to be locked up in a room and every three hours drink a glass of water.
That day the problem was my hair, it looked a bit dirty and I though in my wonderful turban! Piece that remembers sophistication, elegance and class of the twenties, and luckily for me, back to the streets, but rather say that it has never gone away.
In the end I decided on a black jumpsuit fitted to the waist and lace detail on the sides to teach underwear, like shoes a bicolor sandals, gold belt and the key items of this outfit, turban gives class to any look and the clutch recreating the covers of Vogue. A ring covering the entire finger and neck a chain with a small cross.
This time the lips were in coral like the nail polish.
What do you think about this solution?
Thanks for your comments !!
Mono: Blanco (sales), Sandalias: Unisa SS/2014, Clutch: Mercadilo ArtesanoAlicante, Turbante: ???, Cinturón: Turquesa (local shop) Handmade thanks mummy, Anillo: Bershka (sales), Cadena: Aristocrazy,
Jumpsuit: Blanco (sales), Sandals: Unisa SS/2014, Clutch: Market Alicante, Turban: ???, Belt: Turquesa (local shop) Handmade thanks mummy. Ring: Bershka (sales), Necklace: Aristocrazy